Un pixie es un ser feerico de diminutas dimensiones, tanto sus cuerpos como sus facciones rememoran a una graciosa mezcla entre los insectos y las hadas; delgados y frágiles, de colores estridentes y casi siempre adptando formas andróginas o masculina. estos seres evocan la travesura más caótica del Sueño Esmeralda, incluso llegando a ser conocidos por su interminable saña; para ellos no hay moralidad ni límites a la hora de divertirse y es este punto lo que más los diferencia de las hadas. Una vez eligen a un objetivo para sus bromas y travesuras, la escalada de burlas puede llegar a la crueldad o incluso a la malicia de quien solo disfruta de molestar incesantemente a los demás.
En los cuentos y el mismo folclore de los habitantes de Azeroth se los describe como seres inconcebilemente molestos e inquietos, usualmente viajan en grupos pequeños, aunque hay quienes han sufrido la maldición de un enjambre de pixies; cuando ésto sucede, la destrucción y la malicia está asegurada debido al frenesí que se contagia y potencia entre ellos.
Habilidades
Estos diminutos seres, a pesar de sus graciosas dimensiones, tienen una excepcional habilidad natural en el manejo de la magia feerica, pudiendo manipularla con extremada facilidad y potencia. Ésto hace de los Pixies criaturas muy peligrosas. Debido a su frenética actitud, los Pixies a diferencia de las hadas buscan cualquier tipo de fuente de Magia feérica en la cual basar sus travesuras, llegando incluso a robarla de otros seres y varios se han visto inevitablemente atraídos ante el poder de la Pesadilla Esmeralda.
Hábitat
Los Pixies no tienen un hábitat definido; se han esparcido a lo largo del sueño esmeralda, unidos en pequeños grupos atraídos por las fuentes de magia feerica y las posibilidades de realizar travesuras.
Sin embargo, se conoce entre los pixies tres grupos medianamente definidos; aquellos que habitan junto a la La Buena Gente en las tierras crepusculares, los que habitan en la profundidad salvaje, y aquellos que se han unido a la pesadilla esmeralda. Los primeros, si bien mantienen su carácter travieso, son conocidos por mantener cierto grado de civilización e incluso armonía con el resto de La Buena Gente, llegando a levantar armas en defensa de los demás. Los segundos, habitantes de las profundidades y lo salvaje, son criaturas destructivas y caóticas, extremadamente territoriales y hasta crueles. Los terceros, habitantes de los Páramos Sombríos, se han unido a las fuerzas de la Pesadilla Esmeralda, desarrollando un carácter malvado, sádico y cruel, disfrutan el humillar a sus víctimas.
Características Adicionales
Dentro de la gran variedad, hay dos características comunes a todos los Pixies; la primera es la inmensa necesidad de travesuras. La segunda es que son territoriales y prontos la batalla; sea con magia o con sus espadas-aguijones, siempre están dispuestos a repeler a quienes los ofendan.